CUIDADO DE LAS JOYAS
Tus joyas son preciosas, así que, tanto si las usas todos los días como si solo las usas en ocasiones especiales, requieren tu cuidado y atención.
Para ayudarle a mantener sus artículos en buen estado, describimos las siguientes recomendaciones.
Tómate tu tiempo. Recuerda quitarte las joyas cuando te laves las manos, te desmaquilles o te pongas perfume. Las partículas presentes en estas joyas y en muchos cosméticos de uso diario pueden acumularse en las cavidades y formar una mezcla tóxica de materiales que puede provocar un deterioro prematuro del metal a largo plazo. Si llevas puestas tus joyas cuando entres en contacto con cosméticos, recuerda someterte a un lavado rápido, tanto tú como tus joyas, para eliminar los residuos.
También es importante saber qué puede causar daños. El contacto regular con detergentes domésticos puede dañar ciertas piedras preciosas y perlas. El oro es particularmente sensible a cualquier producto que contenga mercurio, que podría causar daños irreversibles. El sulfuro presente en los huevos empaña la plata. Evite usarlos en la playa, la piscina, cuando haga deporte, trabaje, cocine, haga tareas domésticas, jardinería, pero también evite deslizar su colgante a lo largo de su cadena, usar varios anillos en el mismo dedo o en dedos uno al lado del otro. Le recomendamos encarecidamente que guarde sus artículos en el estuche en el que vinieron o que se asegure de colocarlos individualmente en sus cajas de joyería de casa y de viaje. Todo esto puede causar golpes y rasguños, cosas que se pueden evitar. Por último, asegúrese de no colocar sus artículos demasiado cerca de fuentes intensas de calor o radiactividad. Una idea es tener en cuenta sus actividades habituales incluso al elegir sus joyas. Antes de usar sus joyas, tómese un momento para echarles un vistazo. Realice controles regulares del cierre, por ejemplo, para ver si está suelto. Compruebe que la piedra sigue fija; agite el artículo ligeramente cerca de su oreja. ¿Oyes un ligero ruido? Si es así, ¡llévate la joya para que la reparemos antes de que sea demasiado tarde! Es importante que limpies tus joyas con frecuencia y de forma correcta. Algunas piedras requieren un cuidado especial y deberías encargar la limpieza de tus joyas a profesionales expertos. Estos artículos serán los que contengan piedras como lapislázuli, coral, perla, turquesa o esmeralda, o incluso si tu pieza contiene un grupo de piedras. Si tu joya no contiene ninguna de las piedras mencionadas, puedes realizar la limpieza tú mismo. Si no estás seguro, siempre pide consejo. Ármate con un cepillo pequeño y suave. Llena un recipiente con agua tibia limpia y jabón suave. Frota la joya con delicadeza, enjuágala con cuidado en el agua y sécala con un paño suave. Te recomendamos que una vez cada 1 o 2 años acudas a un profesional para que revise tus preciosas joyas.
PLATA VERMEIL BAÑO DE ORO
Las joyas enchapadas en oro agregan un tono suave y brillante al artículo terminado, pero asegúrese de tener cuidado con el desgaste general, ya que el enchapado no tiene la durabilidad a largo plazo que tienen los artículos de oro macizo.